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martes, 30 de enero de 2007

La Quiaca, la ansiada frontera

Y aqui estamos, tras perder varias horas en los ultimos dos dias para actualizar esto lo maximo posible.

La Quiaca es una ciudad que esta en la frontera con Bolivia, a la que se puede pasar caminando para llegar a la vecina Villazon.

La ciudad en si misma es bastante fea y no tiene nada para visitar. El centro ademas da la sensacion de ciudad fantasma de las pocas personas que pasean por sus calles.

Sin embargo acercarse a la frontera (lo de frontera es un decir pq se puede pasar tranquilamente por el rio que delimita ambos paises y que ahora mismo esta casi seco), es una experiencia increible, tal es la cantidad de personas que cruzan ininterumpidamente de un pais a otro cargados con pesados fardos repletos de mercancias.

Tras dos dias en esta ciudad que increiblemente se ha convertido en un lugar fantastico para reponer fuerzas (mas que nada por el magnifico hostal en el que estamos parando, de nombre Copacabana), mañana cruzaremos definitivamente la frontera y nos sumergiremos de lleno en la realidad boliviana.

Desde aqui quiero aprovechar para dar las gracias a todas las personas con las que me he cruzado en Argentina, empezando por la familia de Vivu que me hicieron sentir como en casa en Buenos Aires, pasando por Marina, Sole, Euge y Samy (o como se escriba) con las que compartimos partes de este inolvidable viaje por el norte de la Argentina, sin olvidarme por supuesto de Gon y Patas (el torrente argentino) con los que tanto me diverti en Buenos Aires, hasta todas aquellas personas con las que me cruce que realmente hicieron que la experiencia haya sido unica.

En Argentina he encontrado un pais en el sorprendentemente nunca me senti extraño y a partir de ahora prometo convertirme en uno de sus mejores embajadores por el mundo, pq realmente su hermosura y la calidez de sus gentes me ha cautivado por completo.